"El arte del vacío a mí no me interesa"

El director y dramaturgo cordobés Jorge Villegas fue distinguido por la Asociación Argentina de Actores con el premio Podestá a la Trayectoria Honorable después de 30 años de trabajo. Al recibir la mención, en Buenos Aires, recordó a referentes locales como Carlos Giménez y María Escudero, pidió justicia por Santiago Maldonado y aseguró que el teatro está vivo por los jóvenes que hoy deciden estudiar y hacer teatro. Aquí, una interesante charla para alguien que siempre supo poner en escena su compromiso con las ideas y la sociedad.   

 

 

 

El pasado 17 de octubre, la Asociación Argentina de Actores distinguió en el salón Azul del Congreso Nacional a diferentes figuras de la dramaturgia argentina, entregando al cordobés Jorge Villegas el Premio Podestá 2017 a la Trayectoria Honorable. De la mano de su par, Ricardo Bertone, actualmente representante de la sede provincial del Instituto Nacional de Teatro en Córdoba, Villegas fue reconocido así después de treinta años de trabajo.Villegas comenzó sus estudios allá por los `80 y fue en 1988 cuando estrenó su primera puesta, haciendo una versión con impronta personal de «Chau Místerix» de Mauricio Kartún llamada «Malditas Lunas LLenas». Desde aquel entonces hasta hoy, muchos otros títulos han pasado por su cartelera personal, y en todas ha logrado pulir un poco más su visión acerca de lo que significa hacer escena en la actualidad. Hace 22 años fundó Zéppelin Teatro, elenco  con el que lleva estrenadas más de 20 obras, entre las que se encuentran «KYS», sobre Kosteki y Santillán, «Operativo Pindapoy», sobre el secuestro de Aramburu, «Man in Chat o la historia del soldado afortunado», sobre el general San Martín, «Argentina Hurra!» sobre el regreso de Perón, y la multipremiada «Esdrújula, Palabras para Bonino».

 

Villegas es un animal de teatro y en cada recorte narrativo que hace del mundo para llevarlo después en escena, indaga no sólo sobre las emociones humanas, sino -y en particular- en capítulos de nuestra historia como país y territorio latinoamericano. “Si el teatro tiene alguna función para mí es conmover”, dice puntilloso en esta nota, y deja por sentado así, que a través de cada palabra o silencio elegido, él busca enunciar algo y llegar al espectador.

Directo y contundente, al recibir el premio Villegas pidió por Santiago Maldonado, recordó a referentes cordobeses algo olvidados por la cultura nacional y les habló a quienes hoy eligen teatro como oficio y vocación.

De esto, y mucho más -como una trilogía que ya está en marcha sobre el Che Guevara- Jorge Villegas charló con Babilonia Literaria, en esta entrevista que es también una excusa para anunciar sobre la reposición de dos de sus obras el 24 y 25 de noviembre en La Chacarita Teatro.

 

-En tu extensa trayectoria has recibido otros premios, que se pueden clasificar como “oficiales”, como el Premio Provincial de Teatro o el Premio Municipal de Dramaturgia, pero este viene de la Asociación Argentina de Actores, ¿Qué tiene de particular, para vos, recibir el premio a la Trayectoria Honorable de parte de colegas y de una asociación que lucha por el derecho de los trabajadores del teatro?

– Sin dudas que obtener un premio de la entidad a la que uno está asociado y donde los compañeros son los que miden no sólo tu “trayectoria”, sino tu modo de vincularte con el medio, desde lo social, desde lo político, no sé, ser capaz de crear cosas que te trasciendan biológicamente sin dudas reconforta. No obstante los premios, los honoríficos como éste, y los que tienen reconocimiento económico ayudan a por un lado recuperar confianza y los otros a trabajar más relajado.

 

– Tu nombre ha hecho camino en el teatro de Córdoba poniendo en escena hechos que la historia parece querer olvidar. Los traes a la actualidad y a partir de eso, volvemos a nombrarlos, como el asesinato de Kosteki y Santillán, ¿creés que esa es una función del teatro?

– Si el teatro tiene alguna función para mí es conmover. Estamos en un mundo helado, carente de emociones y donde los emoticones son el vehículo con el que la gente hace conocer qué siente, entonces cuando se está frente a un hecho estético las defensas se bajan, y el teatro que tiene como condición fundamental el “aquí y ahora” puede impactar emocionalmente en vos. No es lo temático lo que de da valor al teatro sino lo que sepas hacer con ello.

 

 

– Tus obras, tus personajes, tus formas de decir arriba del escenario siempre están comprometidas con la historia, y sos un ejemplo de militancia artística. En tiempos donde muchos aun desconfían de las ideas políticas en el arte, ¿desconfiás de los que desconfían?

– Las cosas van cambiando muy rápido acá, hace cinco años Cristina ganaba con el 56% de los votos y hoy no los tiene, qué pasó, qué se hizo mal, qué no se hizo bien, qué simplemente no se hizo. Bien. El arte del vacío a mí no me interesa, es triste ver el lugar espantoso al que los entretenedores nocturnos han llevado la escena actual, un lugar banal, de falsos compromisos, muchos hacen teatro para gustarle a ciertos espectadores “que no quieren cosas densas”, y está bien, yo prefiero que temáticamente y en la forma lo que voy a hacer me interpele profundamente. Si eso pasa tengo más posibilidad que les interese a otros.

 

– Mientras recibías el premio, actores y directores de trayectoria internacional, como Víctor Laplace, Cristina Banegas, Mauricio Kartun te escuchaban atentos mientras recordabas a íconos cordobeses como Carlos Giménez y María Escudero, ¿creés que es necesario un mayor reconocimiento federal del teatro?

– Sí, claro, vivir en un país macrocefálico nos ha privado de tener una representación cabal del país, del país real, no existe una idea verdaderamente federal, pensá que hace cuatro años se inauguró el máximo centro cultural de la argentina, el CCKirchner, y está enclavado en el único lugar de la Argentina que No necesita esos espacios porque los tiene a montones, Buenos Aires, entonces si el progresismo tampoco piensa federalmente estamos liquidados. No obstante tenemos nuestras ventajas, no estamos desesperados perteneciendo a modas pasajeras, tendencias mentirosas y banalidades varias.

 

– Hiciste mención también en la ceremonia a aquellos cientos de estudiantes y actores en formación, señalando que en ellos está vivo el teatro. Después de tantos años de trabajo, ¿qué consejos les darías? ¿qué nunca deberían olvidar?

– Nada, sólo saberse parte de algo más grande, de un movimiento, y que donde vos elijas pasar, como un camino, pasaron dejando su impronta otros, y que tenés más para enorgullecerte que avergonzarte, seguro. Uno necesita una vida para ser un hombre de teatro, no alcanza con un rato.

 

– Tu trayectoria se inicia en los `80, por lo que has visto pasar tres décadas arriba de los escenarios. Si tuvieras que hacer un balance de lo hecho hasta hoy y de la movida teatral en Córdoba, ¿qué dirías? ¿hay aspectos positivos y negativos? ¿en qué creció y en qué no creció el teatro independiente de Córdoba?

– El teatro creció mucho, la cantidad de salas, la cantidad de obras que se estrenan, hay mucha formación, el INT ha favorecido largamente el sostenimiento de la actividad. Se sostuvieron encuentros, festivales, se hacen desmontajes para conversar con pasión sobre determinadas creaciones, se escribe, se publica, un abismo.

 

– Retomando a la actualidad, ¿en qué estás trabajando hoy por hoy? ¿Hay algún estreno previsto en los próximos meses?

– Una trilogía sobre una figura clave en la segunda mitad del siglo XX, el Che Guevara; ahora estamos en la primera parte, que se estrenará allá por mayo del 18 y se llamará EL CHE PARA PRINCIPIANTES y será sobre la infancia del Ernesto.

 

Datos sobre las funciones

 

Al mando de ZÉPPELIN TEATRO, Jorge Villegas sigue celebrando en escena su premio, reponiendo en La Chacarita algunas de sus obras, que son parte del proyecto teatral Patria o Muerte.

Así el próximo viernes 24 de noviembre a las 22 se verá «Operativo Pindapoy, autopsia al secuestro de Aramburu”, con la actuación de Rubén Gattino, Matías Unsain y Santiago San Paulo, haciendo foco en el hecho puntual del secuestro del oficial genocida Aramburu por parte de un grupo de militantes montoneros y los somete a un “juicio revolucionario”.

Link video: https://www.youtube.com/watch?v=RRTYFtODoYw

Y el sábado 25 se verá, a la misma hora, «Argentina Hurra! (Pensé que se trataba de cieguitos)”,  con el mismo elenco más Laura Ledesma y Diego Trejo. Un anciano General, ex presidente argentino, conoce en el exilio a una bailarina nocturna. Ésta a su vez conoce a un ex cabo de la policía dedicado al esoterismo. Luego ambos se trasladan a vivir con el anciano General y actual marido de la ahora ex bailarina. Entretanto, muy lejos de la gran casa, los jóvenes argentinos patean el tablero, fusilan a un ex presidente y reclaman el regreso del General. El General vuelve pero…con la bailarina y el brujo. Los jóvenes querían el poder, el cielo por asalto. Una historia con traiciones.

Link video: https://www.youtube.com/watch?v=m-3EwVKJ7MU

La Chacarita Teatro está en Jacinto Ríos 1449 de Barrio Pueyrredón, las entradas son de $100 y las reservas se pueden hacer por teléfono al 4231159 o vía webwww.lachacaritateatro.wordpress.com

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