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Celebrando el arte de leer

El sábado pasado compartimos una nueva charla del ciclo organizado por Rincón Cultural y Babilonia Literaria. Los escritores cordobeses Graciela Bialet, Lilia Lardone y Esteban Llamosas fueron los invitados de una jornada en la que hablamos de libros, autores y de los procesos de escritura. 

Una inolvidable jornada colmada de anécdotas, experiencias y aprendizajes.

 

 Copyright: Natalí Ruatta Contigiani. 

 

 

 

«Leer también es un arte». Bajo esa consigna los escritores cordobeses Graciela Bialet, Lilia Lardone y Esteban Llamosas se sumaron a la segunda charla 2018 del ciclo que organizamos en forma conjunta la librería Rincón Cultural y Babilonia Literaria. 

 

Llamosas recordó su infancia lectora, ésa que comenzó en casa de su abuela con historietas y cuentos infantiles, que siguió de la mano de los libros de aventuras de la colección Robin Hood y Billiken, y que luego lo llevó a bucear entre los títulos maternos para dar con Agatha Christie y ese mundo policial que luego trasladaría -con una impronta particular- a su obra literaria. 

 

Lardone habló de la biblioteca de su pueblo, esa que le permitió conocer un mundo nuevo, aquella en la que encontró un libro fascinante: La Odisea. 

 

Bialet recordó aquellas siestas de radioteatro, cuando junto a su empleada escuchaban a Jaime Kloner. También habló de su abuelo, el que le transmitió esa pasión por los «minilibros», aquel que le contó «mil y un relatos» y que despertaron en ella curiosidad y pasión por las historias. 

 

 

 

 

Luego nombres como Umberto Eco, Gabriela García Márquez, Albert Camus y muchos otros se fueron colando en un diálogo ameno, divertido, colmado de anécdotas vinculadas tanto a la experiencia lectora como al rol del escritor. 

 

La saga del detective Lespada, la novela «Puertas adentro», las historias juveniles «Los sapos de la memoria, «Si tu signo no es cáncer» y «El jamón del sánguche», el clima policial de «Los asesinatos de la calle Lafinur» y los relatos de «Gente de cerca», fueron también apareciendo en este diálogo que se extendió por casi una hora y media. 

 

Además, nuevamente instalamos el «Espacio lector» en el que integrantes del público se animan a recomendar algún libro a los presentes.

 

Los sorteos de los Beneficios Babilónicos marcaron el cierre de una gran tarde, de esas que valen la pena atesorar. Ahora nos preparamos para julio, con una tercera actividad que estará dedicada a los más pequeños de la casa. 

  

 

 

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