«El duque y yo», la primera entrega de los libros de Julia Quinn, llegó el pasado mes de diciembre en Netflix y se transformó en la serie más vista en la historia de la popular plataforma.
Un relato al estilo Jane Austen aunque con un toque de erotismo y una estética moderna.
La comunidad lectora, seguidora y fanática de la saga de la escritora Julia Quinn esperaba con ansias la versión audiovisual que reúne las historias de los 8 hermanos Bridgerton, integrantes de la aristocracia inglesa durante la época de la Regencia (1795 -1837).
Cuatro hermanos, cuatro hermanas. Ellas obligadas a encontrar el esposo adecuado, ellos padeciendo la presión de hacer lo que se espera de los hombres de su clase. En medio de todo eso jóvenes desesperadas, otras inteligentes y rebeldes, y algunas que deben pagar las consecuencias de sus pasiones.
Todos esos condimentos forman parte de la serie que -basada en la primera novela «El duque y yo»- llegó a fines de diciembre en Netflix y se ha instalado como una de las favoritas de la audiencia. Más aún, desde la popular plataforma, aseguraron que se trata del producto más visto en la historia de la marca.
Si bien se han respetado algunos elementos de la época, los historiadores que trabajaron en la adaptación se tomaron varias licencias para modernizar el producto y llegar a las nuevas generaciones. Así, los y las espectadoras se encontrarán con una reina de raza negra y con muchos afroamericanos con títulos nobiliarios, entre éstos Simon el duque de Hastings, protagonista de esta primera entrega.
Daphne Bridgerton es la hija mujer mayor de la familia. La temporada de bailes ha comenzado y ella debe encontrar un buen esposo. Para la reina es la «joya» de la sociedad pero para la enigmática columnista Lady Whistledon la muchacha es un verdadero misterio. En medio de las presiones sociales, Daphne conoce a Simon con quien entabla una linda amistad. A los fines de que ella pueda encontrar al mejor de los candidatos y él a su vez logre esquivar a las madres que lo persiguen para encadenarlo a sus hijas, simulan un romance que generará toda clase de avatares. La amistad poco a poco irá tomando un rumbo inesperado. El deseo se instalará en la vida de ambos y cambiará para siempre sus caminos.
Cabe destacar que la saga comienza con Daphne y sigue con con la vida y los amores de los otros Bridgerton. Incluso desde Netflix informaron que ya está en camino la segunda temporada que se basará en el personaje de Anthony Bridgerton. De todas maneras, en esta primera entrega, conocemos a toda la familia, sus intereses y su entorno.
Cabe destacar que la serie, que tiene como protagonistas a Phoebe Dynevor, Regé-Jean Page, Nicola Coughlan, Jonathan Bailey y Claudia Jessie, y cuenta con 8 capítulos.
Aunque por momentos la historia nos hace recordar a clásicos de Jane Austen como «Orgullo y prejuicio» o «Emma», la historia de los Bridgerton se permite jugar con un erotismo sutil que le imprime cierta cuota hot al retrato de época.
¡¡¡Una excelente opción para ver el fin de semana!!!